Amnistía Internacional (AI) denunció este lunes 11 que las autoridades de Curazao y Países Bajos continúan violando los derechos de los migrantes venezolanos que llegan a la isla caribeña en búsqueda de protección.
«La organización ha documentado 22 casos de venezolanos, entre ellas menores de edad, que han sufrido violaciones de derechos humanos, como detención automática en condiciones inhumanas, malos tratos, separación familiar y negación de su derecho a solicitar asilo», dice AI en el informe Sin seguridad todavía: Niegan protección a personas venezolanas en Curazao.
Según el texto, que evalúa la situación de los venezolanos desde 2018, la isla puso en marcha un «nuevo procedimiento de protección internacional» que no se ajusta a «las normas internacionales de derechos humanos».
Detalló que los venezolanos que llegan a la isla huyendo de la crisis «pasan automáticamente a estar en detención por tiempo indefinido y, en ese período, sufren presiones para que firmen su consentimiento a la deportación, y tienen un acceso limitado a la asistencia jurídica».
Además, explicó que las entrevistas para evaluar las necesidades de protección son realizadas por los mismos funcionarios encargados de arrestar a los extranjeros con una condición migratoria irregular.
«Hasta ahora, el nuevo procedimiento sólo ha dado lugar al rechazo de las solicitudes del estatuto de protección. La organización ve con profunda inquietud que, como resultado, Curazao devuelva a Venezuela a personas que allí corren un grave peligro de sufrir violaciones de derechos humanos, en incumplimiento del principio de no devolución (non-refoulement)», agregó.
Asimismo, denunció que las condiciones de detención en el «cuartel de los extranjeros, la prisión SDKK (Sentro di Detenshon i Korekshon Korsou) son «inhumanas y las personas recluidas allí están sometidas a privación sensorial, hacinamiento, encierro junto a personas convictas y falta de intimidad».
Con información de EFE