Luego de llegar a la peligrosa selva de Darién, en Panamá, y poder desde allí reflejar la situación que viven los cientos de migrantes que por allí pasan con la intención de llegar a pie hasta Estados Unidos, la periodista argentina Carolina Amoroso conversó con Luz Mely Reyes, directora de Efecto Cocuyo, y Xabier Coscojuela, director de Tal Cual, para dar a conocer los pormenores de lo que pudo observar.
Su trabajo, publicado en las pantallas del medio argentino Todo Noticias (TN), indica que al llegar al también llamado «Tapón del Darién» para ella «el rincón más sórdido que se pueda imaginar», se encontró con muchas realidades, las más crudas que ha podido recolectar en su carrera periodística, las cuales son muestra de lo muco que sufren quienes deciden optar por esa región para cambiar su vida.
«El Tapón del Darién es un macabro secreto a voces. Es la sumatoria de todo lo que está mal con nuestro continente. Los caminantes son, en su mayoría, los expulsados más frágiles de regímenes que siguen gozando de un poder que aplasta y mata», reflexiona la periodista.
Durante la entrevista, Amoroso explica que otra situación que pudo ver es esas cientos de familias de países tan diversos como Cuba, Haití, Colombia y Venezuela, todos con un mismo fin: lograr el manido «sueño americano», que durante el periplo selvático se convierte en pesadillas.
«El Darién es una selva que se traga los sueños y se traga las almas. No podemos dimensionar cuantas personas han desaparecido, porque no hay un registro. Ha habido muchas denuncias de crímenes sexuales en el Darién. Las personas se van huyendo de la pobreza y de la exclusión que viven en otros países», indicó.
La periodista resalta que otra cosa que pudo ver es lo peligroso que se torna el camino, debido a las condiciones propias del terreno, algo que no miden quienes se atreven a esa «aventura».
«Si conocen a alguien que dice que va a migrar de esa manera, díganle que no lo haga. Es demasiado peligroso; el Darién es el infierno en la Tierra»; recomienda, a la vez que sostiene que en muchos casos el trasfondo de esto es de tipo económico.
«El negocio de la migración es una zona de diversificación del grupo que ejerce el control de la selva del Darién. Es un negocio millonario».
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