En Cúcuta abren campamento para evitar embudo migratorio

Las autoridades colombianas instalaron en Cúcuta un campamento sanitario transitorio en el que los venezolanos que desean regresar a su país por la pandemia podrán estar máximo 48 horas.

El objetivo de este espacio es evitar el «embudo migratorio» que se ha ido formando por las restricciones de tránsito decretadas por el Gobierno de Nicolás Maduro.

Los primeros beneficiarios serán 500 venezolanos que están en el puente internacional Simón Bolívar, que conecta a Cúcuta con San Antonio del Táchira, y que no han podido ingresar a Venezuela porque el Gobierno de Maduro decidió que por allí solo pueden pasar diariamente 300 retornados los lunes, miércoles y viernes.

La «estación sanitaria transitoria» está ubicada al lado de las bodegas del puente internacional de Tienditas, donde estaban almacenadas decenas de toneladas de ayudas humanitarias que el presidente de la Asamblea Nacional Venezolana, Juan Guaidó, intentó ingresar a su país el 23 de febrero de 2019.

Prevención

Según la Gobernación de Norte de Santander, departamento del que Cúcuta es capital, el traslado hacia Tienditas de los migrantes que se encuentran en las inmediaciones del Simón Bolívar se hará en las próximas horas.

La decisión de abrir el campamento transitorio, donde hay carpas de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), fue tomada luego de una reunión del Puesto de Mando Unificado de Salud en la que se analizó la situación que viven los migrantes ante la pandemia de la COVID-19.

El ministro de Salud, Fernando Ruiz, explicó que el objetivo del campamento será que los venezolanos tengan condiciones «humanitarias excelentes, con las mejores condiciones higiénicas, de manejo de personas y de prevención de riesgos».

«Con el apoyo de la comunidad internacional y en un trabajo conjunto con la Gobernación y las Alcaldías del área metropolitana de Cúcuta, se acondicionará un espacio para las personas, donde podrán estar máximo dos días y evitar que estén en las calles (…) anexas al puente», comentó, por su parte, el gerente gubernamental de Frontera, Felipe Muñoz.

No es albergue ni refugio

La Gobernación de Norte de Santander aseguró que el campamento no es un albergue ni un refugio, es un estación en la que los migrantes podrán estar máximo 48 horas y tiene una capacidad para 600 personas, distribuidas en camarotes y carpas, aunque en un principio solo habrá 500.

Allí los venezolanos tendrán acceso a baños, duchas y alimentos, así como a atención médica y psicosocial. También recibirán una almohada y sábanas, un kit de aseo, espacios para almacenar su equipaje y atención para las mascotas.

Tras cumplir las 48 horas allí, las autoridades locales trasladarán cada lunes, miércoles y jueves en autobuses a 300 venezolanos que retornarán a su país.

Texto y foto: Agencia Efe